El proceso de galvanizado consiste en aplicar una capa delgada de otro metal sobre una superficie metálica existente. En la mayoría de los casos, se utiliza zinc como material de recubrimiento para estructuras metálicas. Esta capa protectora de zinc protege al metal del entorno circundante. El acero galvanizado puede soportar condiciones ambientales adversas, lo que lo hace duradero e ideal para uso exterior.
Ventajas del Acero Galvanizado
1 Protección mejorada
La finalidad principal del galvanizado es prevenir la oxidación; por eso la superficie del acero galvanizado está recubierta de óxido de zinc. El concepto detrás del galvanizado es que la capa de zinc debe corroerse primero, permitiendo que el acero permanezca intacto por más tiempo. Sin recubrimiento de zinc, la probabilidad de corrosión del metal es mayor, y la velocidad de corrosión se acelera debido a la exposición al ambiente natural.
2. Mayor vida útil
Esto es un resultado de las propiedades protectoras del recubrimiento. Estudios indican que bajo condiciones normales, una pieza de acero industrial galvanizado puede tener una vida útil de hasta 50 años. En ambientes altamente corrosivos con exposición significativa al agua, el mismo componente metálico puede durar hasta 20 años.
3. Mejor apariencia
Está ampliamente reconocido que el acero galvanizado se ve mejor y más brillante en comparación con la mayoría de las aleaciones de acero.
Aplicaciones del Acero Galvanizado
Los usos del acero galvanizado son ilimitados. De hecho, se utiliza en muchas industrias, como la construcción, plantas de energía, agricultura y deportes. El acero galvanizado también desempeña un papel clave en la construcción de carreteras, edificios, puentes, vías ferroviarias, puertas, estructuras de señales, contenedores de almacenamiento y esculturas.
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